Crecerse ante las adversidades

El Valencia logró en la temporada pasada el ansiado objetivo de terminar entre los cuatro primeros de la clasificación, para poder disputar así la Champions League tras un par de años ausentado de la misma. Pero para que se confirme la vuelta del club che a la máxima competición internacional, los de Nuno primero deberán superar al AS Mónaco en la previa. Y debido a este enfrentamiento que nos ha deparado el sorteo, sin duda el más atractivo de todos los que se disputan, analizaremos al equipo de Leonardo Jardim a modo de previa.

Bajas sensibles

Lo primero que hay que destacar al hablar del Mónaco son las bajas. Leonardo Jardim sufrió un duro contratiempo en forma de lesiones en el encuentro ante el Lille. Layvin Kurzawa y João Moutinho tuvieron que abandonar el encuentro antes de tiempo por problemas físicos producidos durante el mismo. El centrocampista portugués será baja durante, aproximadamente, 4-6 semanas al sufrir un esguince en los ligamentos de su tobillo, por lo que será baja para toda la eliminatoria. En el caso del lateral francés, no se descartaba su participación en el encuentro de hoy pero finalmente la contusión que sufre en su tobillo ha hecho que Jardim lo deje fuera de la convocatoria. Si algo positivo puede sacar el técnico portugués de todo esto es el hecho de que Kurzawa podría llegar, de hecho sería lo más normal, a la vuelta en el Stade Louis II.

Sin duda son dos bajas muy sensibles. De hecho, si uno atiende a los partidos del Mónaco y se pregunta que jugadores son imprescindibles para el técnico portugués uno es João Moutinho. El ex del Oporto es el único centrocampista de la plantilla caracterizado por su gran salida de balón, por su capacidad para romper líneas con pases en vertical hacía los jugadores de tres cuartos de campo. Sin Moutinho, el Mónaco pierde a su organizador, a quien distribuye los ataques estáticos con criterio. Otro de los jugadores que pueden contar con esa condición de imprescindible, quizá en menor medida, es Layvin Kurzawa. El joven lateral francés es un puñal por el costado izquierdo, una fuente de peligro constante. Además, en éste inicio de temporada había mostrado una gran compenetración con Ivan Cavaleiro, extremo titular por su banda, y entre los dos venían protagonizando muchas de las mejores acciones ofensivas del equipo. Sin Kurzawa, el conjunto del Principado pierde a una de sus mejores bazas ofensivas.

Se espera que Kurzawa pueda estar disponible para la vuelta en el Louis II.

Otra de las bajas con las que cuenta Leonardo Jardim es Aymen Abdennour. Pero ésta no es por ningún tipo de lesión, sino que el tunecino se encuentra apartado del equipo ante un posible traspaso que lo lleve lejos del Principado. Sin Abdennour el Mónaco pierde a su mejor defensor. Ante su ausencia, Jardim viene apostando por la veteranía con una pareja de centrales formada por Ricardo Carvalho (37 años) y Andrea Raggi (31 años). Otra opción para el centro de la zaga podría ser el brasileño Wallace, pero no se espera que el técnico portugués cambie lo que le viene funcionando ante uno de los encuentros más importantes de la temporada -siempre y cuando Raggi no sea desplazado a uno de los laterales como solución a la baja de Kurzawa-.

La amenaza

Sin João Moutinho y Layvin Kurzawa, como ya hemos dicho, la principal arma ofensiva de éste Mónaco es Bernardo Silva. El joven centrocampista portugués, reciente subcampeón de Europa sub-21, será el mediapunta en el 1-4-2-3-1 de Leonardo Jardim, con absoluta libertad para moverse por todo el frente de ataque. Bernardo es un jugador rápido, de muy buena técnica y que posee una gran capacidad para dejar atrás a defensores gracias a su gran conducción con el balón pegado al pie. Ante la ausencia de Moutinho, el ex del Benfica es de los pocos jugadores que quedan en la plantilla monegasca capaz de romper una defensa organizada mediante una jugada individual o un pase entre líneas para sus compañeros.

Además, puede ser letal en los contragolpes que lance el conjunto monegasco mediante los desplazamientos en largo de Toulalan o, incluso, las conducciones emprendidas por el propio Bernardo. Cabe destacar que el Mónaco de Jardim es un equipo muy peligroso al contragolpe debido, en gran medida, a los jugadores con los que cuenta en la parcela ofensiva. Tanto Dirar como Cavaleiro, quienes serán los extremos titulares, son jugadores muy rápidos y a ellos hay que sumarles a Anthony Martial, que partirá como delantero centro. Si a esto le sumas el rigor defensivo que ha caracterizado al Mónaco desde la llegada al banquillo de Jardim, no hay duda de que los del Principado se convierten en un conjunto muy peligroso pese a las bajas. Tampoco hay duda de que ésta es una prueba de fuego para Bernardo Silva, que está ante la oportunidad de brillar ante el gran público liderando a su equipo en una cita importante. ¿Cumplirá?

Bernardo Silva deberá liderar a su equipo en una cita tan importante como ésta.

El once de Jardim

Si no hubiera ninguna baja, el once titular que sacaría Jardim saldría solo. Pero como no es así, hay que darle vueltas. Y muchas más de lo que parece. Y es que la gran polivalencia de los jugadores monegascos da pie a un gran abanico de posibilidades para solucionar las bajas que sufre el equipo. Para paliar la ausencia de João Moutinho el recambio más natural sería la titularidad de Mario Pasalić, pero no está tan claro. El mal nivel mostrado por el croata en su debut en la Ligue 1, fue sustituido a los 20 minutos de partido para dar entrada a Bernardo Silva, da pie a la posibilidad de que Jardim opte por adelantar la posición de Fabinho al doble pivote, pasando así Raggi al lateral derecho y entrando Wallace para completar la zaga. Personalmente me inclino más por la opción de que Pasalić sea titular, Fabinho se quede en el lateral derecho, Elderson ocupe el izquierdo y que la pareja de centrales no se vea modificada. Otra opción sería que Dirar pasará al lateral derecho, donde ya ha actuado en varias ocasiones, y entrase El Shaarawy por la derecha. Está es la más remota, en parte por su carácter demasiado ofensivo, y el italiano esperará en el banquillo con un papel de revulsivo.

Mi apuesta para el once de Leonardo Jardim.

Veremos como responde el Mónaco, que llega mucho más rodado, ante un equipo complicado como es el Valencia de Nuno. Pese a las bajas tiene argumentos de sobra para plantar cara al conjunto che, e incluso para imponerse a ellos. Pero las ausencias merman mucho al conjunto del Principado, que deberá crecerse ante las adversidades si quiere disputar la Champions League por segundo año consecutivo.